Pienso que diciembre es un mes muy familiar y también de muchos gastos. León es una ciudad que al negocio que no lo mata lo enferma, sin embargo las camionetas de acarreo no daban abasto trasladando equipos de sonido, refrigeradoras, camas, consolas y todo tipo de electrodomésticos y artículos vendidos con dolo y comprados con muchas ilusiones en esta época navideña, para empezar a pagar en febrero y hasta en marzo y pasar pagando todo el 2008, 2009 y 2010, por el único delito de haberlo comprado sin prima, sin fiador y al crédito. Que les vaya bien a todos los que en este diciembre se casaron con el Gallo más gallo, La Curacao, Tropigás y otras hierbas aromáticas. Seguimos en contacto.
